Es la alegría del hogar, es el nieto de mi amiga Leonor, una visita inesperada recibí hoy en mi casa, durmió, regaloneo, tomó su papa y dejó sus pastelitos sobre mi cama, apenas tiene 15 días de nacido y es la felicidad sublime de sus padres, tías y abuelitos.Es una delicia tenerlo en brazos, una vida tan pequeñita, frágil y dulce, aquí junto a Lukas que no se atrevió a cargarlo.