Sería tan fácil sólo desearlo y enmendar la vida pasada, tan fácil fingir que no volveré a verte, tan fácil no mirar Internet, tan fácil cerrar los ojos, tan fácil voltear y dirigir la mirada al horizonte, es fácil inventar que no estás, pero todo sólo resulta por breves segundos y es porque el alma y corazón siempre están dispuestos a encontrar nuevas respuestas, esperanzas y oportunidades…
Callo, duermo, desvanezco entera a tu manera, olvidarte es flirtear con la muerte y cada día entre mis labios tristes se mecerá tu nombre que no me servirá para llamarte…alquilaste mi mente sin pedir permiso, enmarañaste mi corazón sin siquiera proponértelo, te adueñaste de mi existencia sin previo aviso…
Muchas veces nos envolvimos con palabras devorantes, ansiosas y apasionadas y yo seguía el juego peligroso que terminó demoliéndonos y los recuerdos permanecerán vivos para volver a tocarlos, sentir u oler, pero siempre con la amenaza de que jamás nos devolverán esos instantes, perderme un segundo de ti ojalá pudiese, eres un ladrón y yo testigo…
Extrañarte ya es un ejercicio adictivo al que me acostumbré sin opción a curarme….
